Convertirse en un profesional del body piercing no es cuestión de moda, estética ni simple destreza manual. Es, ante todo, una cuestión de honestidad.
Honestidad con uno mismo, para reconocer en qué punto estás, qué sabes y qué aún necesitas aprender.
Honestidad también con los demás: con los clientes que confían en ti, y con las personas a las que decides formar, si tomas el camino de la enseñanza.

Porque cuando alguien decide enseñar esta profesión, no solo transmite técnica, transmite una filosofía, una forma de hacer las cosas, una responsabilidad que pesa más de lo que parece. Iniciar a alguien en la perforación corporal no es simplemente «enseñarle a perforar». Es abrirle una puerta a un mundo complejo, profundo y exigente, que requiere de paciencia, respeto y mucha más preparación de la que a veces se imagina.

Cada persona tiene sus tiempos, sus aptitudes. Algunos desarrollan la técnica rápidamente, otros conectan primero con el trato humano o la observación. Pero para que todo eso pueda florecer, hace falta una base sólida, un punto de partida que no se improvise.

Porque perforar cuerpos no es solo hacer agujeros.
Es conocer la piel, sus capas, sus límites.
Es manejar instrumental delicado con seguridad y precisión.
Es comprender que estás interviniendo en el cuerpo de alguien que confía plenamente en ti.

Por eso, el aprendizaje en el body piercing debe ser amplio, metódico y respetuoso. Debe tocar aspectos esenciales como:

  • ✔️ El manejo del instrumental con seguridad y conciencia.

  • ✔️ El conocimiento detallado de las características de la joyería corporal, sus materiales, medidas, acabados.

  • ✔️ La calibración exacta, entender medidas en milímetros, juegos de tolerancia, y cómo esto influye en el resultado final.

  • ✔️ La técnica estéril de marcaje, donde se define buena parte del éxito de la perforación.

  • ✔️ El trabajo en la sala de esterilización, manipulación de objetos punzantes y residuos biocontaminados.

  • ✔️ Los cambios de joyería en condiciones asépticas, especialmente en piezas recientes o delicadas.

  • ✔️ El uso correcto de desinfectantes y antisépticos, conociendo sus principios activos y aplicaciones.

  • ✔️ La organización de la cabina y el área de trabajo, siguiendo protocolos de limpieza y bioseguridad.

  • ✔️ Y por supuesto, una sólida base de anatomía superficial y conocimiento de los diferentes tejidos, porque no todos los cuerpos responden igual.

Y eso es solo el comienzo.

El Body Piercing no es una fórmula, es una práctica viva que se nutre de la ciencia, la ética y el arte.
Por eso, formar parte de este mundo exige compromiso.
Pero sobre todo, exige mirar hacia adentro, reconocer nuestras capacidades y también nuestras limitaciones. Porque desde ahí, desde la verdad, es desde donde realmente se empieza a crecer.

En el mundo del body piercing, enseñar no es simplemente mostrar cómo se sostiene una aguja o cómo se monta una mesa de trabajo. Enseñar es traspasar conocimiento, valores, criterio y sensibilidad. Es acompañar a otra persona en sus primeros pasos dentro de una disciplina que, aunque muchos vean como moda o estética, requiere rigor, precisión y, sobre todo, respeto.

Por eso, la psicología del instructor es tan importante.
Debe convertirse en una herramienta para canalizar todo lo aprendido durante años y poder transmitirlo con cercanía, amabilidad y claridad. Porque lo que se enseña en los primeros días, lo que se dice en las primeras clases, queda grabado. Y si no se hace con responsabilidad, si se transmite miedo, inseguridad o soberbia, el resultado puede ser contraproducente.

He visto personas que, tras una mala formación, arrastran durante años inseguridades técnicas o miedos innecesarios. Y eso no se debe a una falta de talento, sino a que quien les enseñó no estaba preparado para formar.

La persona que se inicia necesita que se le aclaren todas sus dudas, por básicas que parezcan.
¿Dónde poner el marcaje? ¿Por qué esa joya y no otra? ¿Cuánto o si se inflamará esta zona? ¿Cómo se esteriliza correctamente? ¿Qué hacer si el cliente se marea?
Todas esas preguntas tienen que encontrar respuestas. Y no solo técnicas, también humanas. Porque cuando alguien empieza, necesita más guía emocional de lo que a veces se imagina.

Claro que ayuda que el alumno tenga perforaciones previas. Le da perspectiva. Le permite comprender ciertas sensaciones, ciertos detalles de la joyería o los tiempos de cicatrización.
Pero aquí no estamos hablando del alumno.

Estamos hablando del formador.

Y ser formador no es para todos.

He visto a personas que llevan cuatro, seis años trabajando como profesionales del piercing y ya están ofreciendo cursos de formación. Lo que me lleva a preguntarme:
¿Realmente conocen lo suficiente?
¿Han vivido las suficientes situaciones reales como para saber cómo actuar, cómo enseñar, cómo corregir?

Creo que no.
Y lo digo con todo el respeto.
Enseñar sin estar preparado es, además de una irresponsabilidad, una falta de ética que puede perjudicar gravemente al sector. Porque un mal formador no solo perjudica a su alumno: distorsiona el oficio entero.

Como dice el refrán: “Más sabe el diablo por viejo que por diablo.”
Y es que la experiencia no se improvisa.

avatar de autor
AlexBlakan Autor
Perforador y Modificacdor Corporal desde 1999 / Autor del libro de piercing Body Tool en 2014 y 2024
Tags

No responses yet

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: Alexander Roncero Villafruela.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Indedmedia.com que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Shopping cart0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
0
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos.
Privacidad